Los días que voy al monte, al poco de levantarme, me acerco a la ventana y echo un ojo. Esa primera impresión me importa, creo que me dará una idea del día que nos puee esperar.
Viviendo en este rinconcito del cantábrico, es muy habitual que, aún habiendo te pasado media semana mirando webs y apps de meteorología, no sepas a que carta quedarte: que si empezara a llover a partir del mediodía, que si el frente pasara por la tarde, por la madrugada. Lloverá persistentemente, si, pero, ¿intensamente?
El viernes pasado mire también por la ventana y vi pasar gente corriendo por el bidegorris como no. Tanta gente corriendo, bajo la lluvia. Llovía un poco, y seguiría lloviendo.
Los whatsapp dándose de bajá de la excursión comenzaron a llegar desde el día anterior, y el domingo por la mañana a primera hora, alguien hizo lo mismo que yo, y siguieron llegando más watsapp anunciando su renuncia a mojarse.
Ya el viernes habíamos decidido no suspender la excursión. No podíamos ver con tanta precisión el futuro, y, como una política de empresa no escrita, seguimos adelante. Además, el autobús especial de refuerzo ya estaba pagado. Pensé (pensamos) que si había cuatro familias animadas a atravesar Ulia, nos era suficiente, y que seguro que disfrutaríamos. No sería la primera vez.
El autobusero esperaba junto al xxxx hablando con Anabel. Algún chistoso en DBUS nos había enviado un autobús articulado de 100 plazas. Nuestra limusina particular. Estábamos cuatro gatos, y el quinto casi no se monta, porque tuve la mala idea de decirle al chofer que saliera puntual. Por suerte, advertimos que xabi se acercaba corriendo y pudimos contar con su presencia y la de su hijo Iker.
Xabi es biólogo, miembro de la asociación naturalista Haritzalde y guarda forestal del PN de Aiako Harria. Como mis compañeros en ABMM lo conocen, alguna vez hablaron con el larga ver la posibilidad de organizar alguna salida guiada y comentada por el, aunque todavía no hemos cerrado ninguna actividad con el. Sade luego que sería un lujo hacerlo, y nos lo apuntamos para el curso próximo.
Nuestra limusina hizo las dos paradas acordadas. En la primera se subieron Martín y Ohian, y en la segunda jOSU y sus dos hijos. Con sólo dos paradas y siendo domingo por la mañana, llegamos al sc de Gros en 10 minutos desde la av, Madrid.
Aún nos faltaban blanca y su familia y nuestro compa Pablo. Entramos en un bar a tomar unos cafeses. Amaia, la tesorera del AMPA, no soltó ni un duro. Es dura de roer. Os aseguro que la corrupción generalizada no ha llegado a nuestra AMPA. Pagamos las rondas.
Apenas llovía, aunque desde luego las nubes habían bajado hasta casi la playa. Ambiente.
Llega blanca con su familia. ,e pregunta por Eider. Su hija ane contaba con su presencia para sentirse más acompañada, por una niña de su edad. Pero Eider incomparece por causa del carnaval. Olé por ane y su comportamiento. Que placer para sus padres disfrutar de ella, que pronto llegar los tiempos en que no querrán ir con nosotros ni a por el pan.
Subimos por las escaleras de rodil, que fue una idea de Fernando, acertada porqu se hacer más llevadero que la cuesta-escaleras que nacen en el frontón de la Zurriola. Cuando cogemos la pista principal nos topamos con Karlos, el director de amara Berri, quien el viernes pasado, durante la txokolatada, ya nos advirtió que igual aparecería. Encantados de contar con su presencia. A Karlos le gusta el monte y es activo en rras, por lo que mantenemos cierto contacto con el.
Momentos después nos adelanta Edurne pasaban, que sube a Ulia en btt junto a un chico. Hubiera estado bien pararla sin piedad y hacerse un selfie promocional con ella, tipo "Edurne pasaban con ABMM", "con ABMM yo aprendí a amar la montaña"...
Antes de subir por el senderuelo del pinar, xabi nos detiene un ratito en el que nos explica, a la vista de una charca habilitada recientemente, el proyecto que han iniciado en fechas pasadas entre Aranzadi y el ayto. De SS para la reculara ion de esta serie de hábitats, en el pasado más frecuentes, para lo anfibios en Ulia. Desde aquí agradecer este gesto.
Al pasar un pequeño muerte de piedra, nos acercamos a un enorme cortado que ya habíamos comentado como un punto a proteger de cara a los niños. Paramos un momento, a la vista del mar. El sendero hasta Basollua sigue siendo muy placentero, y al ,Melgar al antiguo chalet de Ulia, alcanzamos la niebla, que crea un ambiente íntimo y de sosiego.
Llegados al bar del tiro al plato, Basollua o merendero de Ulia, paramos 25' donde vamos sacando caldos, chorizos cocidos y cafés varios. Los a niños pican algo en una mesa en el exterior. No hace frío, llueve un poquito, o nada.
Nos quedan aún dos tercios de la ruta al menos. Este perímetro rato, en el que volvemos al sendero de la travesía clásica, es uno de los pocos donde la lluvia arrecia un poco, aunque como apenas hay airé, no es molesta, y con los paraguas abiertos nos protegemos bien.
Iker y Ubai -los más pequeños, oigan ustedes- van como motos, en cabeza de carrera, todo el tiempo, muy motivados. Extrañamente pasan por la parte más profunda de los charcos y por la parte del barrizal donde esta más cremoso. Les repito alguna vez que regulen sus fuerzas, que queda bastante. Si tenéis hijos sabréis que esto no sirve de nada. La palabra regular no entra en su vocabulario.
Esta parte, la que va desde el collado de Ulia hasta el faro de la plata, es la más clásica para mi; me trae siempre recuerdos de infancia, cuando mis hermanos y yo íbamos con mis aitas dede casa hasta san Pedro de mañanera del domingo. No se me ocurre mejor plan que algo parecido a esto en un domingo familiar.
Apenas paramos. Son 8 km, una distancia claramente abordable con niños desde los 4 años. En el amplio espacio bajo el faro de la plata hacemos un descansillo, sin embargo. Las nubes bajas cubre todo el macizo de Jaizkibel; sólo se abren a través de ellas las aristas, a oso de proas, que caen al norte desde las cimas.
El descenso de la carretera del faro hasta puntas es un picado espectAcular, a no perderse. Increíble encontrar personas que se mueven y te digan que no lo conocen.
Ya estamos en puntas. Un valiente esta pescando. Una afición muy zen...
En puntas, foto de grupo. Son las dos y cinco del mediodía y, como era de prever, no podremos parar en la factoría Albaola para que nos den unas pinceladas sobre lo que allí hacen y presentan. Ya sabéis: están construyendo una réplica de la nao san juá de l año 15&&. Además de ver el estado de dicha construcción, hay un pequeño museo muy inteserasnte sobre la dorada épica de los balleneros y las factorías en las que se construían naves a cascoporro.
Llegamos a san Pedro, embarcadero de la motora a enn Juan. Que bonito es san Juan. Uno no se aburre de visitar este enclave.
Arribados al frontón de san Pedro (más bien, al bar que hay enfrente), damos por concluida la ruta. El GPS me marca 8,33 km. Algunas familias Cohen el bus para ir a Donosti, y otras se acercan al topo a la estación de Herrera. Nosotros, que no somos tan radicales, nos quedamos en dicho bar dando cuenta del bocata traído desde casa y de un par de rondas de vinos.
LA EXCURSIONA a Ulia ha ido muy bien. Son duda la meteorología ha sido determinante en la pica asistencia, pero todos los asistentes nos sentimos reconfortados de haber vencido a la pereza mañanera.
