viernes, 15 de mayo de 2015

Irurtzun-Biaizpe-Latasa. Valle de Larraun, Montaña Vasca



Esta excursión fue ideada para que los más txikis de Amara Berri ikastetxea acudieran a la misma. Es nuestra versión actual de la salida clásica de sillitas. El año pasado nos quedamos con la copla y este año decidimos ya hacer una salida adaptada, sencilla y relativamente corta, pero "de andar".

La ruta que hemos hecho se podría haber hecho en sillita al 50-60 %, y el resto es por sendero bien marcado.

Por otro lado, no sabemos por qué factor principal (a elegir entre la meteorología benigna, sencillez de la ruta, target de familias más animadas, efecto llamada o alineación de astros) pero esta ha sido la salida con más público desde hace años (desde luego desde que lo llevamos noostros).

Esta inusitada afluencia nos ha provocado un fondo de satisfacción y a la vez algún pequeño quebradero de cabeza, dado que nuestra máxima prioridad es mantener el nivel de calidad en la preparación y en la ejecución de la misma.

Por ello, nos ha sabido mal tener que decir "no" a alguna familia que se quiso apuntar al bus y ya no había plaza. Cortamos al llegar a completar el segundo autobús (total 112 plazas), cosa que sucedió antes de la fecha inicialmente estipulada, que era el jueves. No obstante, el "no" era relativo, ya que les dimos opción de acercarse en coche particular a la salida. Bien es cierto que es posible que alguna otra familia más quisiera apuntarse y no pudiera al estar borrado el enlace al formulario de inscripción.

La afluencia final, con alguna baja, fue de 118 personas.

Llegamos a Irurtzun con un día de verano excepcional, caluroso pero agradable. El paso bajo Biaizpe es espectacular, por un sendero rodeado de flores de todo tipo. Incluso -aparte de los consabidos buitres leonados- todo un alimoche nos observaba desde un árbol colgado de la Hermana Menor.

Tras el paso, descendimos -ya por sombra- hasta el río Larraun, por el fresco bosque de galería, hasta la parada que nos organizó perfectamente Iñaki Urrizalqui, biólogo y aita de Amara Berri, para observar e identificar invertebrados que viven en el río (algún karramarro también apareció). Allí estuvimos unos 40 minutos, antes de reemprender la marcha hasta Latasa. Fue la parte más dura para los niños ya que era por pista (vía verde del Plazaola) y bajo la solana, con menos alicientes, y a más de uno se le hizo larga (se veían muchos niños en brazos y a hombros: lo normal).

En Latasa, en su frontón cubierto (buena gestión de Fernando para conseguir la txartela electrónica para acceso, etc.), llegaba la fase que nos había creado más stress: la recogida de bandejas y el reparto de las raciones de pizzas recién horneadas en Plazaola gozotegia, a cargo de Txani y su pinche.

(Casi) todo salió bien, y con la ayuda de algunas madres y padres se pudieron repartir con fluidez. Algunas familias no se acordaban de su pedido, lo que pudo ralentizar un poco el reparto.


Después de dar buena cuenta de las pizzas, algunos fuimos a por el merecido café al obrador, para después organizar el concursillo de dibujo entre los niños que se animaron a ello (bastantes), hacer el reparto de los premios (todos ellos por sorteo) y la entrega de las napolitanas caseras a los niños (también se lanzaron con furor a la furgoneta de los helados que recorre nuestra soleada geografía desde Gasteiz, y que imagino que saldría de allí con un bonito botín).

miércoles, 6 de mayo de 2015

Las txartelas en los buzones de las cimas

Mendizaleen artean oso zabalduta dago (Euskadin, behintzat) gure gailurretan dauden buzoietan txarteltxoa uzteko ohitura. Txarteltxoek, gehiago edo gutxiago landuta, batek edo batzuk (partikularrak edo klubak) egindako igoeraren fedea ematen dute.

Gailur horretara iritsiko den hurrengo taldea, buzoiaren barnean arakatu eta txarteltxoa aurkituko egingo du (askotan eguraldiak eta denboraren poderioz marruskatua) eta etxera itzulita, bertan agertzen den helbidera bidali. Modu honetan zirkulua itxiko zaigu eta igoera egiaztatuta geratuko da... beste mendizaleekin adiskidetzeaz gain.

Argazkian “Jaizkibel mendizale taldea”ren txartela ikus dezakezue. Baztanen zelatariko bat den Legate mendiko gailurreko buzoian aurkitu zuen lagun talde batek. 


Hay una costumbre extendida en el mundo mendizale (al menos en Euskadi), y es la de dejar, en los buzones que pueblan nuestras cimas, una tarjetita más o menos elaborada que da fe de la ascensión efectuada por una o varias personas (particulares o clubes).

El grupo siguiente que llega a esa cima, accediendo al interior del buzón, encuentra la tarjetita (muchas veces desvencijada por efecto de la meteorología y el paso del tiempo), y, llegados a casa, la persona "de buena voluntad" la envía por correo a la dirección que indica la misma. De esta forma se cierra el círculo y se constata la ascensión, aparte de confraternizar en la distancia con otros mendizalles.

En la foto se muestra la tarjeta del "Jaizkibel mendizale taldea", encontrada por mí y un grupo de amigos, recientemente en el buzón de la cima del monte Legate, uno de los vigías del Baztán.